viernes, 25 de febrero de 2011

* ¡ MÍRAME CUANDO LLEGO A TI ! *





¡MÍRAME CUANDO LLEGO A TI!



En los dinteles de tu alma
va transitando nuestro espíritu.
La nostalgia nos abraza,
la nostalgia nos abriga.
Es la elevación plena de nuestro sentimiento
que cuida y acuna nuestro sensual deseo.

Deseos de amar y ser amada
abrazando inmarcesibles sueños.
Desde ellos te pregunto:

¿Quieres mi compañía?,
¿quieres vibrar en el aura de mi cuerpo,
en mi néctar, en mis caricias?

Mírame, ¡aquí me tienes!,
soy revelación a tus sueños.

Desde mi faz espiritual
te envío mi voz, mi respiración,
el latido de mi corazón inquieto
con un sonido de grillos que enamoran
al percibir tu sensación que me requiere.

Tengo esta ansiedad de ti,
ansiedad de proyectar nuestras almas en espejos,
en sus azogues de ilusión,
en sus mercurios de alegrías.

¡Ven! ¡Mírame!

Aquí me tiénes para calmar tu sed,
Deseo tu tacto,
deseo me sientas,
deseo que me veas
como en el brillo de una estrella fugaz,
en los paisajes de tus lejanas tierras.

¡Ven! ¡Mírame!

mírame en aquellos pájaros que te vieron,
que contemplaron tu lluvia…
En el refulgir del relámpago que me ilumina…
Mírame en el silencio
en una noche serena,
mírame en la bóveda del firmamento,
mírame en el susurro del mar.

¡Acerca tus labios!
¡Los estoy presintiendo
y mi corazón pide a gritos ese beso eterno!

Sólo quedan mis flores amarillas,
madreselvas perfumadas
para embriagar tu alma.
Por ti soy cielo y tierra,
la sirena de tu mar.

Quiero posar en tus manos
el soplo de mi alma
para que sea ostra
que se transforme en tu perla coralina.


Esther Gladys Noriega
Estrella
*Sadhana*


sábado, 5 de febrero de 2011

* MI AMOR *







*MI AMOR*



Sonríe el viento,
sonríen las hojas de todas mis plantas…

La lluvia hace cantar a los árboles
en chispitas transparentes, cristalinas
y vos y yo hacemos germinar
las semillitas de palabras tiernas deleitando los oídos.

En aquellos rinconcitos
cantan las calandrias y todo se embellece…

¡Si! hasta los colores más oscuros se transforman en luces
encandilan al espíritu encadenando eslabones
que en centurias de tiempo lejanos debían estar unidos.

Resucitó la esperanza de nuestra perfecta unión.
¡Escuchen estrellas!¡Estrellas a ustedes les grito!
Mi amor a llegado…

Repican mis campanas con sonidos de encajes,
puntillas, lencería coloreadas en rojo pasión
por pétalos aterciopelados.

El campanario de mi corazón se estremece
con sonidos de inocencia salvaje,
se embriaga en el perfume de maderas de oriente,
mi pecho es una mezcla de sándalo,
jazmines y embrujos de Sevilla.

Su presencia es la hierba aromática que despierta mis sentidos,
la ardiente sensualidad de mi piel
húmeda por la dilatación de sus poros
derrama sobre mis tibias, tiernas caricias
jamás imaginadas en lecho nupcial….

El cielo y sus estrellas testimonian aquél sublime encuentro
armonizando entre sonidos de campanas.

La madurez abraza al pueril deseo,
deseo de sentir el gong de los sentidos definidos
en la infinidad del deseo intimo.

Por fin mis oídos escuchan las campanas de tu voz
y en esta tarde tórrida tu voz, tu imaginaria presencia
refrescó mi alma… ¡Te amo mi amor!...





Esther Gladys Noriega
Estrella
Sadhana